LA NENA...

Hace tiempo, una pequeña de largo cabello y mirada serena, corria entre verdes àrboles, admiraba el aroma de las flores y cantaba con el trinar de las aves...

Iba y venìa, por un sendero lleno de margaritas corriendo al encuentro de los brazos de su padre: ¡papà! gritaba la niña, con rebosante alegrìa y una sonrisa que pronto moriria...

Ella corria y corria, disfrutaba del danzar de los amres y la tranquilidad del paisaje, era feliz, agitaba sus brazos imitando a los azulejos, queriendo volar y jugar con el viento. Cuando depronto, el sonido de un cañon perforò el cielo y pintò de rojo a blanca arena. La niña solo pensaba en el palpitar de su pecho mientras veìa con asombro y lagrimas en los ojos un agujero que perforaba su cuerpo, la nena regalò su ùltimo grito al silencio. Suspirando por ultima vez, viò como su padre corria sin aliento, para tratar de robarle al tiempo algo que ya habìa muerto...

Anonima R.A

MINUTOS,HORAS,DÍAS

Minutos se escurren entre mis dedos, cual agua de manantial que no quiere contaminarse con la impureza de un corazón partío...

Fresca brisa de la noche que traes a mí, tan crueles recuerdos de las pocas horas que aún conservo de su presencia, arrancalos de mí, que no soporto la fría lluvia de pensamientos que se cuela en mis huesos, calando en mis nervios con un estremecedor arrebato de locura...

Sol naciente que sales cuando muere mi lucero, deja que se quede un rato más, permite que me acompañe en la letal agonía, que en mi pecho palpita cada vez que involuntariamente vuelvo a suspirar...

Dulce manjar, que en otros tiempos deleitabas mi paladar, atraviesa ahora mi garganta quemándome donde antes me permitía descansar, continua, por favor, torturando mi alma, tal vez así me concentre, en algo diferente que no sea tu andar...

Los días pasan, ya no escucho el murmullo de tu voz, ya se fue el extraño silencio que acompañaba tus palabras, ya me dejó el triste recuerdo de tus pasos dispersos por nuestra casa, pero hay algo que nunca abandonará mi memoria, lo único que aun atesoro en mi alma, mi distorsionado reflejo pintado en tonos grises en lo profundo de tus ojos negros...

Anonima RA

LA LUZ DEL CAMINO...

Durante mucho tiempo, he sido tu guardia, tu apoyo, tu vigilante, tu sombra oculta, y aun así, jamas me miraste, nunca te diste cuenta de mi presencia, y aun peor, creo que en ninguna ocasión valoraste mi existencia

Bajo la luz de la luna y con el tenue resplandor de una desgastada vela, quemè tu ser, borrè tu recuerdo de mi mente, apague la llama de tus pasos perdidos en mi casa, tu esencia reducida a cenizas en un enorme jarrón en lo alto de mi corazón.

Tristemente ahora me doy cuenta, que has tenido los ojos puestos en otro horizonte, quizás màs profundo que el mi ser alcanza a proyectar, la luz que mi corazón te daba, no fue suficiente para acompañar tus noches.

Pero siempre contaras conmigo, asi yo quiera evitarte y desconectar el cable que me une a tì, mi mente y mi alma te ayudaran a cruzar, asi solo me veas como una luz artificial o como una de las tantas lamparas que iluminan el parque en el que solíamos estar.

Anonima RA